7 de diciembre de 2014

Nuevos recuerdos...

Te encontré como en cualquier día , en el fondo de la habitación, de la gran habitación, tal vez ya no la recuerdas, hablo del cuarto más grande de nuestra casa, la habitación blanca, la de las luces discretas y las ventanas de madera, lo recuerdo porque es donde te recargabas sobre uno de los 3 pequeños balcones para mirar el jardín, para hundirte en el verde pasto que rodeaba nuestra casa, esa en la que vivimos y que ya no recuerdas, estabas ahí, con tu vestido blanco, ese que ocupabas cada que me querías hacer sentir mejor, ese en el que te ves hermosa, fácil de describir, solo con una palabra: perfecta.

Tomaba tu cintura mientras tu admirabas el paisaje, la perfecta percepción de tus huesos y tu carne, la perfecta sintonía de tu aroma y tu silencio, la perfecta sensación de tus movimientos y mis manos, como un sueño del que uno no quisiera despertar, como el sueño que era… así que solo me perdí en ese instante, decidí fundirme contigo y aquel extraño pasto en el que hora vivíamos, ¿has escuchado las conchas de mar? Ese era nuestro ruido eterno, ¿escuchas? Es el mar en el que ahora vivimos.

Volteaste lentamente, me preguntaste algo, no sé qué, estaba demasiado distraído contigo, estaba demasiado perdido contigo y aun así no te diste cuenta, cada quien vivía en su mundo, para mi genial, para ti bueno, no sé qué es lo que estabas viviendo en ese instante, cada cabeza es un mundo y tú eres un mundo difícil de imaginar.

Tomaste mi mano ¿recuerdas?, caminamos juntos ¿recuerdas?, nos amamos juntos ¿lo sientes?; bajamos las escaleras poco a poco, recorrimos ese extraño ángulo recto, todo extremadamente blanco, extremadamente sutil, paso tras paso llegamos a la entrada de la casa, nuestra casa ahora, adquirida con cada uno de nuestros pasos… No recuerdo que pasó después, desperté feliz, el solo verte me hace feliz, el solo imaginarte me hace feliz, es lo único que me queda ahora, la distancia hace de esto un poco difícil, la distancia no es el olvido.




18 de agosto de 2014

Young again

Debe haber algo bueno sobre enamorarse todo el tiempo de la persona equivocada, de la carrera incorrecta, del clima más inadecuado, puede ser que en algún momento logremos encontrar esa flor escondida en medio del pantano, en medio de ese montón de mierda que solo logra hacerla lucir más bella, puede ser que después de todo “Todo” haya valido la pena.

Siempre hay alguien, en algún lado de la historia siempre hay alguien más, sería demasiado inocente o estúpido de nuestra parte creer que somos los únicos siempre, o los mejores o los elegidos, la realidad, pese a las perspectivas que podamos tener de ella, únicamente debería orillarnos a un camino, a el camino que nos lleve a ser cada vez mejores.

No soy bueno estableciendo mensajes esperanzadores sobre una vida bien planeada, aquel que me conozca un poco sabe que solo escribo en mis momentos de decepción, es una práctica que he tratado de evitar, pero la verdad es que solo soy un perro persiguiendo su cola una y otra y otra vez.

Platique con una amiga hace un tiempo, me preguntaba sobre lo que quería de esta vida y yo solo recordé las cosas que necesito, no pude decir una solo cosa que en realidad quiera, sé que lo hago, sé que tengo propósitos, no soy tan mediocre en ese aspecto, sé que hubo muchas cosas este año que quise demasiado y que también quise perderlas porque sabía que podría estar mejor, aunque no haya resultado así siempre. Y así llegamos al asunto de ganar y perder, ¿he ganado algo? Sí, claro… ¿he perdido algo? Sí, siempre, y siempre ha sido así, después de la secundaria no ha cambiado nada, sigo siendo el mismo inmaduro de siempre, por eso me gusta escribir de estos temas, me siento joven de nuevo. (jaja)

La RAE define a la cortesía, en su definición número uno como  “f. Demostración o acto con que se manifiesta la atención, respeto o afecto que tiene alguien a otra persona.” Espero no ser el único para el que cortesía no significa un regalo o un te quiero, para mí la honestidad es suficiente demostración de cortesía, modificando un poco alguna frase de algún estado de algún contacto en alguna red social “la honestidad es un acto de respeto hacia ti mismo”*.

Debe hacer algo bueno sobre todo el tiempo estando enamorado de la persona indicada, de la carrera correcta, del clima más adecuado, y si es así no lo se...






*La frase exacta era “la fidelidad es un acto de respeto hacia ti mismo”, pero “honestidad” me parece algo mas real. 

27 de diciembre de 2013

Una vida

Un día ordinario y común conocí al amor de mi vida y tuve la oportunidad de vivir juntos muchos días más. Ella no iluminaba mi vida, no me hacía sentir especial y único, todo el tiempo me recordaba lo difícil de permanecer feliz con una persona inestable, lo difícil de poder estar conmigo. Tal vez nunca prestó la suficiente atención, si pudiera mirarme ahora por 5 minutos se daría cuenta de que gran parte de mi personalidad termino siendo un desecho de mis intentos de creer que todo puede ser mejor viviendo “incomodo”.
Hubo muchas cosas que marcaron el camino, pisamos todos los días piedras juntos, pudimos avanzar por lugares que ni siquiera existían, logramos vencer nuestro orgullo de negarnos a probar algo diferente y también el orgullo o ignorancia del que sabe que no correspondíamos al mismo sitio.
No hace falta ahora haber estado más tiempo juntos, nuestro tiempo “fue” y hasta ahora no hay nada tan perfecto como nuestra propia mezcla, producto de recuerdos, secreciones y sonidos. Tampoco agradeceré lo que pasó, sería por demás estúpido el agradecernos por haber estado juntos.
Somos perfectibles, podríamos repasar cada uno de nuestros actos, revisar esa parte del camino que nos hizo tomar direcciones distintas, a veces cuando la tristeza me vence me alegro un poco de pensar que en alguna realidad continuaremos juntos y nos separaremos mil veces más.
(…)
La vi, estaba parada en medio de la nada, enojada, tal vez un triste, decidí hablarle, el alcohol me ayudo un poco a eliminar mis represiones, lo siguiente que supe es que nunca estaríamos juntos, pero me gusta tener un poco de esperanza, lo siguiente que supe es que tal vez nunca estaríamos juntos.

Solo fueron 365 días para darme cuenta que te podría vivir de nuevo, para darme cuenta que fuiste todo y que ahora solo has muerto, como todo, como cada año.

9 de noviembre de 2013

El sol de Toluca.

He vivido aquí toda mi vida, no recuerdo ninguna parte de ella sin estar en contacto con el clima tan femenino de esta ciudad, ese clima hermoso por ser tan cambiante, un lugar cuyo humor por la vida se explica solo, cuya realidad es tan básica que a veces parece que solo finge ser difícil de entender cuando solo se trata de un simple y frio/cálido lugar en el cual podemos vivir tratando de ser felices.
He caminado sus calles muchas veces, aquellas alejadas del centro, aquellas calles que sufren por nuestra idea del “centralismo”, las calles que son abandonadas y solas por la noche y en las que cualquier silueta atenta contra nuestra vida, donde la seguridad no llega, no hace falta, son calles tan fuertes que se defienden solas y que nos atacan con tan solo caminar por ellas. Existen otros lugares más felices, menos difíciles, existe una variedad de matices que nos pueden llevar al instant crush que tanto deseamos, caminos de adoquines disparejos, pisos de cerámica resbaladizos, árboles enormes cubriéndonos de la lluvia y regalándonos un poco de naturaleza que en este lugar ya vamos olvidando.
No son pocas las políticas en las cuales se termina decretando un odio privado por la naturaleza, no soy un defensor de las políticas ambientales como tampoco de las de equidad de género, resulta para mí una idea redundante, fui educado por unos padres que me enseñaron que la vida incluye libertad, uno no necesita caminar por el mundo haciendo leyes para proteger algo que ya está incluido en el espíritu de cada una de las cosas: el derecho de ser. Desafortunadamente una de las cosas que odio de este lugar es eso, las personas que viven sin saber que en sus actos solo esconden deseos reprimidos, sentimientos de inferioridad y un enorme y pegajoso pesimismo.
Estamos en este lugar de manera aleatoria, nuestros padres pudieron elegir cualquier otra ciudad para vivir, pudieron escoger cualquier otro trabajo, vivimos siendo productos de decisiones pequeñas, alternas y simples, ahí se encuentra la complejidad de la vida, en todos esos actos sutiles que hacen que las cosas solo sucedan, de ahí que muchos nos queramos ir, que algunos quieran seguir aquí, que podamos seguir caminando y aburriéndonos una y otra vez de las mismas calles porque hemos decidido caminar por los mismos lugares.
No necesitamos ir lejos para conocer al mundo, todos representamos una parte de la humanidad, tenemos gente mendigando en todos lados, nosotros mismos mendigamos sin darnos cuenta, quiero suponer que nuestra insatisfacción es sólo producto del clima, de ese sol que nos mantiene tibios y que de pronto sin avisar nos congela, congela nuestros sentidos y nuestros sentimientos, dejándonos ahí, parados, viendo pasar gente sin destino, cubiertos por ropa holgada que limita nuestros movimientos, tomando tazas de café que no nos dejan alejarnos de un baño, buscando lugares pequeños para despojarnos de todo eso que nos detiene y después encontrarnos tomando felicidad para mantenernos vivos, robando instantes de la existencia de otros.
Vivo en un pequeño lugar, en una colonia con historial delictivo, producto de la mezcla de maestros y obreros, nada pretencioso, un lugar básico y simple; un lugar que me persigue. Duermo a la misma altura en la que me gustaría ser enterrado, números negativos y positivos, perspectivas diferentes, situaciones similares, ventanas abiertas que nos pueden llevar a la iluminación o la muerte, recuerdos incesantes de sentimientos libres, palabras repetitivas en textos cortos, errores ortográficos sin sentido que cambian el sentido de un todo.
Mi ciudad es “la bella”, una mujer en verdad hermosa, una mujer olvidada en tiempos más románticos, aún existen algunas personas que observaron plenamente su belleza, que vieron su cuerpo desnudo, su piel de mármol ahora marcada por el frío, sus piernas largas que nos llevaban al paraíso, el cabello largo y fino por el que podríamos pasar nuestros dedos por toda la eternidad, ahora, muchos solo vemos en Toluca una historia de Carlos Fuentes, aquella vieja y sorda que decide ser hermosa por instantes pero que solo nos muestra detalles para atraparnos, para mantenernos cerca, ¿qué podría decir yo? solo soy una de esas personas atrapadas en el recuerdo, de los que decidieron conscientemente querer a una ciudad que solo es una vieja, triste y sola mujer que ha sufrido por ser usada tantas veces. Aquí seguiré mucho tiempo, yo sé que de algún modo ella será joven y bella de nuevo.

5 de noviembre de 2013

historias cortas

La historia es simple, me encuentro con alguno de mis amores perdidos, esos a los que les dedique mi vida por 5 minutos, los que ahora son libres porque siempre lo fueron, los que encontraron su camino mientras seguían caminando de la mano conmigo, básicamente esos, mi vida se resume a situaciones cortas y torpes, cosas sencillas para entender, después de encontrar a alguna aquella solo me queda besar mis recuerdos en ellas, besar un poco a mi pasado por haber encontrado a la perfección y a ver sido tan humilde o idiota para dejarla ir, siempre pasa, ha pasado poco pero siempre ha pasado.
No seré el mártir de la historia y espero tampoco ser el tonto, pero siempre que regreso a ese lugar, siempre que fuerzo a mi mente a encajar en un lugar que ya no existe, lo único que hago es atravesar con esfuerzo un molde anterior, arrancar un poco de mí, perder músculos, piel y en ocasiones fragmentos de huesos, todo para poder estar ahí, feliz por un rato observando a alguna desconocida, esperando el momento indicado para besarla, y ahora sé que toda mi vida ha sido el momento indicado para besarla.

Mi objetivo primordial podría ser el sentirme más ligero, dejar viejas costumbres y seguir adelante, ahora solo me siento vacío, un poco más cada vez, nada que uno quisiera sentir todos los días, una sensación pegajosa e inquietante que solo me hace querer regresar para buscar un poco de todo lo que he perdido y de lo que ya no recuerdo haber ganado en algún momento.

25 de agosto de 2013

Despedida...


Aun no comprendo que es todo lo que se buscaba con esto, ¿ser un poco más feliz?, ¿Sentirse un poco menos solo?, la vida parece más simple cuando tenemos las respuestas apropiadas, aunque sin duda alguna no existe la suficiente cantidad de respuestas para todo eso, todo se convierte en algo inútil, en un sinsentido como el escribir en una hoja blanca, algo tan lógico como la vida antes y después de querer matar a otra alma, ¿Qué podemos recibir de todo esto?
Caminamos, vivimos soñamos, reímos; pero ya no lo hacemos juntos, ahora solo somos tristes testigos de nuestra vida acompañados de alguien más, de alguien que podríamos matar con nuestras propias manos, de alguien que nos ha dejado caminando solos, como tantas veces antes, como tantas veces más lo haremos y aun así existen esos momentos de felicidad, en los que todo adquiere un tono menos ocre al que normalmente vemos cuando despertamos, un poco más saturado, un poco más falso y difícil de creer.
Esto no es algo fácil, tu siempre has sido algo extraño de entender, alguien difícil de querer, tan difícil que espero no puedas entender esto tan fácilmente, como tampoco me ha sido fácil escribir todas las ideas abandonadas que ahora estás leyendo, pero… quisiera que dejara de existir un “pero”, que ahora fuera ayer y que nada de esto hubiera pasado de esta manera, pero ¿Qué más da? Un poco de diversión a cambio de no sentirnos solos, un poco de alcohol a cambio de ser felices 5 minutos, un poco de soledad a cambio de quererte aquí.
¿Dónde estás ahora que te necesitamos? Ahora que ya estamos solos. Sé dónde puedo encontrarte, se dónde puedo ir por ti, pero tal vez tenga un poco de miedo sobre lo que pueda pasar después de todo esto, tal vez ya no seas la misma de antes, tal vez ya no me quieras, tal vez todo esto ya no exista y ahora solo este enamorado de mi recuerdo modificado por los días sin ti, que no son muchos pero son los suficientes para seguir creyendo que nada de esto seguirá existiendo, que mañana despertare tan solo como siempre, buscando dinosaurios y arrancando pasto de lugares perdidos.

5 de mayo de 2013

5 de Mayo 2013


“…paso con lentitud, como quien viene de tan lejos que no espera llegar.”
Jorge Luis Borges



Me gusta escribir cosas, pensamientos, cuentos, confirmaciones de mis reglas gramaticales olvidadas, hasta ahora todas estas cosas forman parte de la mayoría de mis libretas, recuerdos perdidos entre notas de la facultad, entre apuntes de la secundaria, entre de más irrecuperables momentos de estos 24 años creo. Con el tiempo, alejándonos un poco del origen, experimentamos perspectivas difusas y simples que nos hacen anhelar el cambiar parte de lo que hemos hecho, en mi caso solo busco un poco de orden así que, ¿Por qué no comprar una nueva libreta? Algo que sea solo para todo eso que ahora está perdido.

Pero ¿Qué es lo primero que se podría escribir en una libreta? Algo simple, una lectura rápida para saber  que vendrá después, los recuerdos del último año, el saber por qué todo cambio a partir del último 5 de mayo.

Dejaré la tarea de vivir años anteriores como un propósito de este, regresar cada día de cada año al anterior, por lo menos a aquellos pequeños detalles que aún se recuerden, y es que no han sido pocas las veces en las que he estado sentado con algún alma desconocida e interesante, de esas que después olvidas, hasta que regresas a ese pequeño lugar bajo un árbol y una gota de savia cae sobre tu cabello, pero eso aún no lo sabes, así que pides que no haya sido un ave la que dejó caer lo que sea que ahora tengas como adorno, tocas con cuidado y te das cuenta que solo es una lagrima viscosa y con un extraño aroma a verde, raro, ya sabes lo que dicen: solo en la noche fluyen verdes naturales.

Solo te levantas, caminas hacia el baño para limpiarte un poco y el, solo se queda afuera, te espera, como te esperara por mucho tiempo y vida más, pero eso tampoco lo sabes aun. Sales por fin y solo tratas de ignorar el tema, lo vez reír y crees que se burla de ti, la realidad es que solo esta feliz, solo es feliz por poder estar contigo.

Tu sabes que fue todo lo que paso, sabes por que recordamos este día o por lo menos será por lo que ahora recuerde de un modo agridulce el mes de mayo, eres mi historia para comenzar una libreta, lo que algún curioso trate de leer cuando consulte estas hojas por algún motivo.

¿Qué es lo primero que se podría escribir en una libreta? La vida, una parte de mi vida…

Leon, Guanajuato.
5 de mayo del 2013
17:18 hrs

26 de noviembre de 2012

Quiero que seas feliz.


Quiero que seas feliz, quiero que seas feliz conmigo, sé que es difícil o tal vez imposible, pero no me juzgues por querer regresar mi mente a ese lugar donde se siente tan tranquila, ese lugar que me hacía sentir tan especial cuando era solo mío.
Dime que tengo que hacer para robarte, para no terminar siendo alguien más que te moleste para obtener un poco más de ti a cambio de nada.
No he encontrado un lugar así en ningún lado y no mentiré, tampoco lo he buscado, no quiero compararte y en mi cabeza el mundo es mejor sabiendo que no existe nadie como tú.
¿Ese lugar aún existe? O solo me estoy engañando, la última vez que te vi parecía que nunca nos habíamos despedido, tu seguías haciéndome feliz y yo quería seguir contigo, dime que es cierto, que no me engañé, que podemos hacerlo de nuevo, que puedo regresar contigo.
Sé que no todo en la vida es perfecto, sé que no todo en la vida eres tu, que existen infinitas posibilidades y que en este tiempo lejos tal vez hayas encontrado a ese “alguien” mejor, porque ¿Sabes? Siempre existe alguien mejor.
Si todo es asi solo dilo, dime o pideme que deje de buscar algo que ya no existe, algo que ya no esta, algo que no puedo crear. Tomaria alguna frase cursi, te pediría que si es asi solo rompas mi corazón y sigas caminando, pero ya nos hemos roto muchas veces, solo dime si podemos o no juntar nuestras cenizas y hacer que algo mejor crezca en todo esto.
Yo te dije que me iría por siempre y no pude mantenerme lejos mucho tiempo, no quiero hacerlo, no quiero alejarme. O  ¿es que tú me quieres lejos? Si es así que no te importe mi vida y aléjame, porque si puedo estar un poco cerca de ti no me resistiré a besarte.
No he idealizado una sola parte de ti, así te conocí, consiente de cada una de tus muchas facetas, me enamoré del brillo de tu vida, de tus tonos más oscuros, de esa manera tan tuya de demostrar tu cariño, de la combinación perfecta que tenía al mezclar un poco mi vida contigo.
¿Y que si ya no hay una puerta? ¿Y que si ya no hay un camino? ¿Cuál es el problema de ya no seguir contigo? Sé que si las cosas ya no son o si ya no serán así, es solo porque has encontrado otro camino mejor, por que tienes aún muchos planes, porque ya no tiene sentido una vida en la que podamos compartir nuestros hijos.
He perdido mi cordura cada vez un poco más, así que si te vas y ya lo has decidido, si no quieres darme una oportunidad, sé que todo estará bien, puedo seguir queriendo, adorando y amando un fantasma.



3 de junio de 2012

Anoche soñé contigo.


Anoche soñé contigo, soñé con lo mucho que me había dolido perderte, fue tan rápido y tan simple que en algunos momentos pensé que solo era un sueño dentro de otro, en realidad no lo podría explicar en este momento , pero aun así aunque te hubiera dejado ir no te había perdido y seguías siendo tan especial para mí como siempre lo has sido, a veces pienso que no haber tomado tu mano fue el peor error que pude hacer, no por que estuviera mal en sí, sino porque no me permitió el vivir cosas que pudieron haber sido tan buenas.

Pelear por ti, es tan difícil pelear por alguien, pero aun así lo haría aunque supiera que pudiera perder la pelea, no por aquella frase de “es peor no intentarlo” sino porque por ti yo podría hacer tantas cosas que a veces creo que tu ni siquiera las esperarías de mi.

No quiero hacer de esto un texto de sufrimiento en el que la gente se quiera ubicar para sentir que de verdad son alguien para mi, varias veces lo he hecho y no es muy agradable el que los demás te agradezcan por algo que no les pertenece pero que aun así decidieron tomar, como cuando caminas con un regalo y otra persona llega a arrebatártelo sin darte siquiera la oportunidad de explicar que en realidad ellos no son para ti lo que ellos esperan ser, pero aun así lo entregas porque eres una buena persona y no te gustaría humillar a nadie, sin darte cuenta que el único humillado eres tú.

Aun tengo tu listón en mi muñeca, ya no se cuanto tiempo llevo con el, prometí no volverlo a colocarlo una vez que se cayera pero ahí sigue, inerte, esperando algo que también espero, en realidad creo que no es algo que se deba esperar, es algo para lo que debería actuar pero aun así, por miedo o por ignorancia no lo hago, en el sigue todo lo que te prometí un día, y cuando digo todo me refiero a lo que recuerdo y a lo que por el momento he olvidado, alguna vez me dijiste que nunca cumplo mis promesas, y es verdad, hasta el momento no te he dado nada de lo que te he prometido, ni una manzana ni un helado, tal vez ni siquiera te he dado el tiempo que merecieras tener, pero ahí está, en mi muñeca, esperando que tu vengas por él, esperando a que yo me atreva a entregártelo, todo cuanto te debo y todo cuanto pudieras merecer.

Ojala todo fuera tan fácil como pegar las piezas de un corazón que ha sido roto tantas veces y después poderlo entregarlo a alguien más para que lo cuide hasta que ya no lo quiera y lo rompa de nuevo o lo regrese intacto, mi error fue tratar de regalar cada pieza a las personas que pasaban por mi camino aunque no tuvieran la importancia, aunque no lo merecieran, ahora me doy cuenta que no necesito pegamento para unir aquellas piezas de mi vida, ahora me doy cuenta que recuperar esas partes de aquellas personas es casi imposible, porque a nadie se le debería de quitar aquello que le ha sido regalado honestamente.

Tienes una parte de mi, mas grande de lo que tú crees, y no es porque tú no te hayas dado cuenta, es porque yo no te lo he dicho, tú no eres alguien más con una pieza ni eres aquella que se quedo con lo que sobra, a ti te entrego honestamente todo lo que soy, lo que fui y lo que seré, tienes la oportunidad de conservarlo y yo la oportunidad de ocupar un lugar especial en ti, de ser ese atrás de tu puerta, de ser yo en ti.

Podría llegar a ser muy tonto si dijera que todo se ha perdido, es solo que para mí es muy difícil recuperar lo que, ahora dudo, fue mío, y me arrepiento y aunque quisiera culparme, aunque quisiera llamarme tonto por no haberlo hecho no puedo, porque ahora veo cosas que antes no, ahora me doy cuenta de lo que pude haber hecho y que en el propio “pude” esta todo resumido, muchas veces me he puesto a pensar en estar contigo, en caminar frente de ti cuando necesites alguien que te proteja, en caminar junto a ti cuando necesites compañía y en caminar detrás de ti porque yo también necesito ser protegido.

No te pido que me entiendas por que en ocasiones ni siquiera yo puedo explicar mi actitud, ni tampoco te pido que me des una oportunidad porque no sé si la aprovecharía como debiera, y me molesta vivir con el miedo de fallarte de nuevo, me molesta el no saber qué es lo que de verdad quiero de ti, me molesta el no estar contigo y el que tal vez pienses que no eres nada para mi, solo quisiera que esto solo fuera un cuento de terror en nuestra historia, una pesadilla  donde al despertar  me diera cuenta que todo es mentira y que ya no pudiera desear más de ti porque todo lo que pudiera llegar a desear lo tendría.

Nunca pensé sentirme así por no haberme atrevido a morder aquella manzana, si lo hubiera hecho estaría contigo, ahora ni siquiera sigo en el paraíso.



0809081518

Había una vez un elefante.


Había una vez un elefante, un pequeño y gris elefante, si lo veíamos en la distancia con toda su parvada de elefantes no encontraríamos la diferencia, sin prestar atención quizá ni siquiera sabríamos que existió, pero existió y fue diferente.

Pasaron muchos años, de alguna forma pudo soportar su desagrado por tomar de la cola a sus compañeros elefantes, veía como poco a poco los cuernos de ellos crecían y como en algunas ocasiones otros se acostaban, cerraban los ojos y no se volvían a levantar jamás, y el siguió caminando, esperando que entre tanta soledad que solo la comunidad podía ofrecerle, él, algún día, pudiera encontrar un poco de felicidad, pero pasaron más años y nunca fue así, caminó y caminó, en todo el mundo no había ninguna muestra de su existencia más que el mismo y su excremento, el no podía ser feliz y su excremento generaba más felicidad en los escarabajos que su propia existencia satisfacción por vivir.

De pronto, en uno de tantos años, la soltó, en las caminatas matutinas abandono a su parvada, decidió buscar la muerte o la vida, porque nunca creyó que respirar fuera suficiente, tampoco creía necesitarlos y así, paso a paso sus cuatro patas fueron alejándolo de su rutina y acercándolo al sol, mientras su trompa espantaba las malditas moscas que descansaban sobre las grietas de su lomo.

Ellos no supieron nunca nada más de él y en el mundo no quedo más rastro de su existencia que montones de huesos y dos cuernos de marfil cerca de un lago, conforme pasaron los años lo poco que quedaba de él termino en el polvo, siempre me pregunto qué fue de él, si pudo disfrutar un poco su vida, si encontró en la soledad la respuesta a sus dudas, y no me puedo contestar esa pregunta ni todas las que surgieron después de que se fue, ahora solo es un dato curioso y una historia para espantar a los idiotas, pero todos los que sabían de él están muriendo. Después de estar con ellos un momento nos vamos, cada que pasamos por ese mismo lugar los recordamos, pero a él en cualquier lugar lo recuerdo, tal vez un poco de él sea lo que ahora estoy pisando, tal vez debería solo soltar la cuerda y seguir caminando hacia el sol.

(si, era una parvada de elefantes con cuernos)

0902122328